La primera cerveza de importación que probé fue la Leffe rubia y fue hace unos 20 años. Un amigo del grupo de teatro me había invitado a su casa y fuimos antes a comprar varias cervezas al Corte Inglés, ya que estaba la semana dedicada a las de importación.
Realmente hay momentos que cambian tu vida, o que aportan algo que siempre vas a tener. Y no siempre tienen que ser cosas profundas. Así recuerdo yo lo que sentí al probar esa cerveza, que me abría un mundo de posibilidades al paladar y, por supuesto, al asociado mundo etílico.
En esa tarde, yo me llevé más que mi amigo. Ya que él no consiguió llevarme al huerto y yo conseguí un nuevo mundo de curiosidad.
Un amigo peculiar, mi amigo el mago. Porque hacía magia y estaba terminado la carrera de físicas. Creo que es la persona más inteligente que he conocido y recuerdo nuestras largas conversaciones sobre física aplicada al mundo real, al de los sentimientos, etc. Como el agujero negro del amor...en el que cuanto más te metes, más eres tragado.. Aunque bueno, para saber esto no hace falta ser físico.
Después de esa Leffe, vinieron muchas (no por número, aunque algunas veces, también), sino por variedad. Desde las archi-conocidas Franziskaner, Paulaner, Chimay, Grimbergen, Judas, Blanca de Brujas, Hoegarden... A un largo sinfín.. Porque ese amigo dejó el mundo de la física y de la magia y puso un bar de cervezas de importación. Y ahí he podido ir conociendo desde las ipas más amargas a las dulzonas stout con lactosa.. Una, de cuyo nombre no puedo acordarme porque cayeron varias, que es la que tiene mayor grado de amargor (¿o se dice amargura?..es que eso me suena a corazón partío)..
En fin, así podría decir que sé algo de cervezas. Y que al pedir en un bar pregunto cuáles tienen porque la que tengo prohibida es la Mahou roja. Me tomo 2 y me levanta el mayor dolor de cabeza del mundo y no he notado que eso me pase con ninguna otra.
O también influida, porque cuando llegaba alguien al bar de mi amigo y le pedía una Mahou, él siempre ha respondido, "no tenemos, aquí solo tenemos buenas cervezas". Casualidad o no, lo de mi dolor de cabeza es estrictamente cierto. Y, bueno, con la verde no me pasa y me gusta para una tarde de cañas. Vamos que, salvemos a la Mahou también. Que hay espacio para todos en el mercado de las cervezas.
sábado, 23 de julio de 2016
martes, 12 de julio de 2016
Esto no es una carta de amor
Es una
declaración de sexo
Con
usted, señorita
No le
estoy ofreciendo ni una vida plena, ni pasión hasta el final de los días
Futuro
no quiero ofrecerle, ya que, cada cuál debe andar su camino
Y pasado, tal vez, ya lo olvidé, como usted olvidó el suyo
Y pasado, tal vez, ya lo olvidé, como usted olvidó el suyo
No pido
más que un encuentro furtivo donde vaciar el alma
No pido
más que usted me entregue esa luminosa sábana blanca que es su cuerpo
A
cambio de estos valles dorados del mío
No pido
ni tan siquiera ternura, ahora mismo no la necesito
Estoy
pidiendo guerra
Una
guerra sin muertos, ni sangre, ni sufrimiento
Lo que
busco son explosiones y correr por las trincheras
Y
dejarse la vida en el campo de batalla
Ese
tipo de guerra
Después
de la batalla, empezaré a caminar
Cogeré
mi mochila y la iré vaciando a cada paso
Y
nuestra historia podrá ser eterna
O ni
siquiera digna de una telenovela
Pero,
al menos, será un buen recuerdo
Con el
que morderme los labios
Sentada
en la roca más alta
Allá
donde de se acabe el mundo
Entiendo
que esta propuesta requiere tiempo
Las
guerras cortas no son guerras, son invasiones
Pero
tampoco le voy a robar más tiempo del estrictamente necesario
Para
sentir que ninguna de las dos muere en el campo de batalla
Pero
que se defendieron los ideales del bando
Sin más
se despide de usted
Esperando
acuse de recibo y noticias suyas
Ésta
que nunca será eternamente suya
Porque
la eternidad es mucho tiempo
O, tal
vez, sí,
La
eternidad estará siempre con nosotras
Porque
la esencia de cada uno de nuestros segundos
Existirá
para siempre en la eternidad
viernes, 1 de julio de 2016
Inmóvil
Siento que será para siempre
Que no volveré a mover mis piernas ni mis labios
Conozco muy bien esa posición en mis labios
El de arriba ligeramente sobre el de abajo
Comisura emulando un sútil sonrisa
Como si no pasara nada, como si fuera un día como otro cualquiera
No puedo sentir dolor, ni siquiera indfiferencia.
No puedo sentir nada
Ella y la distancia
Ella y yo inmóvil
Pero si está lejos, ¿no debería moverme?
Ella y qué más da.
Ella y ya está bien.
Ella y los mares de luchas
Y los dientes apretados
Los brazos encogidos
Y las palmas inmóviles
Inmóvil, sí...ya recuerdo
Es un día como otro cualquiera
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