Soy una chica bastante sana. Bastante significa:
más que poco
pero tampoco demasiado
El caso es que eso hace que, por ejemplo, desayune con leche de avena,
zumo de pomelo natural, y espelta y quinoa como cereales. (por lo que veo ni
siquiera el corrector ortográfico del Office conoce la palabra quinoa y la
subraya de rojo).
Y también implica hacer ejercicio moderado. Nadar los fines
de semana y entre semana yoga y caminar y correr de 5 a 7 kms diarios. Normalmente
voy por un parque que está cerca de mi casa.
Empecé hace 3-4 años y siempre me solía cruzar con un abuelo
de unos setenta y muchos que caminaba
con muchísima dificultad mientras arrastraba un carrito con una de esas
bombonas de oxígeno con gomas que van a la nariz.
No sé por qué, imagino que por vernos muchas veces, un día
nos saludamos. Y no recuerdo si el saludo vino de mí o fue él quien tomó la
iniciativa. El caso es que, a partir de ese día, ya cumplíamos el ritual del
amable saludo en todas las ocasiones que nos cruzábamos.
Iban pasando los meses, las estaciones y los años. Y la
escueta palabra “hola” se fue convirtiendo en frases, preguntas y hasta
conversaciones. Cuando volvía a verme dando otra vuelta, me decía, “`pero,
¿otra vez? chiquilla”. Y yo le solía preguntar “¿cómo se encuentra?. “Vaya
calor” en verano y “vaya frío” en invierno. Conversaciones que se dicen, banales.
Pero nos mirábamos como si realmente nos preocupáramos el uno por el otro, como
si yo sintiera su mano congelada arrastrando el carrito o él contara cada uno
de mis pasos.
Algunas veces iba solo. Pero normalmente paseaba acompañado
de dos amigos, uno a cada lado. Los tres descansaban siempre en el mismo banco, situado en el
cruce de dos caminos y bajo unos árboles. Él en el medio, y sus compañeros
guardando sus costados. Muchas veces me preguntaba cuánto tiempo aguantaría.
Llevo varias semanas sin verlo. Mientras que me he
encontrado como siempre, con sus amigos. A ellos les vi sentados ayer en su
banco. Ambos se habían colocado en los extremos, dejando un hueco vacío en
el medio.
Ups, esperemos que todo este bien.
ResponderEliminarEsto me recuerda llevo días fijándome en una mujer que esta sentada siempre en la misma mesa, esperando su café o lo que sea, L
a ultima vez nos cruzamos miradas. Cualquier día le saludo y le pregunto si nos conocemos. Me transmite mmmm no sé, cercanía.
Feliz fin de semana, Marta.
Feliz finde para ti también, Blau!!
ResponderEliminareso ha pasado con mi padre. mucha gente le ha echado de menos estos meses. pero es bonito que alguien te eche de menos. un saludo y felicidades ¿ atrasadas?
ResponderEliminarGracias!! En realidad, adelantadas!! No ha sido aún, es dentro de unos días. Así que tuyo es el honor de ser la primera en felicitarme
ResponderEliminar