viernes, 18 de julio de 2014

Sooner or later

Soy una chica bastante sana. Bastante significa:

más que poco

pero tampoco demasiado

El caso es que eso hace que, por ejemplo, desayune con leche de avena, zumo de pomelo natural, y espelta y quinoa como cereales. (por lo que veo ni siquiera el corrector ortográfico del Office conoce la palabra quinoa y la subraya de rojo).

Y también implica hacer ejercicio moderado. Nadar los fines de semana y entre semana yoga y caminar y correr de 5 a 7 kms diarios. Normalmente voy por un parque que está cerca de mi casa.

Empecé hace 3-4 años y siempre me solía cruzar con un abuelo de unos setenta y muchos  que caminaba con muchísima dificultad mientras arrastraba un carrito con una de esas bombonas de oxígeno con gomas que van a la nariz.

No sé por qué, imagino que por vernos muchas veces, un día nos saludamos. Y no recuerdo si el saludo vino de mí o fue él quien tomó la iniciativa. El caso es que, a partir de ese día, ya cumplíamos el ritual del amable saludo en todas las ocasiones que nos cruzábamos.
Iban pasando los meses, las estaciones y los años. Y la escueta palabra “hola” se fue convirtiendo en frases, preguntas y hasta conversaciones. Cuando volvía a verme dando otra vuelta, me decía, “`pero, ¿otra vez? chiquilla”. Y yo le solía preguntar “¿cómo se encuentra?. “Vaya calor” en verano y “vaya frío” en invierno. Conversaciones que se dicen, banales. Pero nos mirábamos como si realmente nos preocupáramos el uno por el otro, como si yo sintiera su mano congelada arrastrando el carrito o él contara cada uno de mis pasos.

Algunas veces iba solo. Pero normalmente paseaba acompañado de dos amigos, uno a cada lado. Los tres descansaban  siempre en el mismo banco, situado en el cruce de dos caminos y bajo unos árboles. Él en el medio, y sus compañeros guardando sus costados. Muchas veces me preguntaba cuánto tiempo aguantaría.


Llevo varias semanas sin verlo. Mientras que me he encontrado como siempre, con sus amigos. A ellos les vi sentados ayer en su banco. Ambos se habían colocado en los extremos, dejando un hueco vacío en el medio. 






4 comentarios:

  1. Ups, esperemos que todo este bien.
    Esto me recuerda llevo días fijándome en una mujer que esta sentada siempre en la misma mesa, esperando su café o lo que sea, L
    a ultima vez nos cruzamos miradas. Cualquier día le saludo y le pregunto si nos conocemos. Me transmite mmmm no sé, cercanía.

    Feliz fin de semana, Marta.

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  2. Feliz finde para ti también, Blau!!

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  3. eso ha pasado con mi padre. mucha gente le ha echado de menos estos meses. pero es bonito que alguien te eche de menos. un saludo y felicidades ¿ atrasadas?

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  4. Gracias!! En realidad, adelantadas!! No ha sido aún, es dentro de unos días. Así que tuyo es el honor de ser la primera en felicitarme

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