Llevo pocas semanas yendo a una nueva
piscina. Me cambié de casa y es la que me queda más o menos cerca. He mejorado,
sin duda, respecto a la piscina a la que iba antes. Esta tiene la mezcla estética que me
encanta, edificio antiguo por fuera e instalaciones ultra-modernas por dentro.
Hasta ahora solo había ido a la piscina y nunca había visitado la sauna que se encuentra en las mismas instalaciones.
Pues
bien, el otro día fui con la bolsa de todo el kit de piscina al trabajo para ir
nada más salir. Y como llovía bastante, no me apetecía volverme a meter en el
agua. Así que dije, este es el día perfecto para conocer la sauna.
Entrego
el bono en la entrada y pido que me apunten para la sauna (hay un máximo de 5 personas en cada turno) para el siguiente turno, si hay hueco. La bedela, me dice
“pasa si quieres ya, aunque son y diez que creo que hay una persona o nadie y
te puedes quedar un poco más para el siguiente horario”. Loca de alegría por no
tener que esperar, me dirigí con paso rápido a la puerta. Me moría de ganas de
entrar.
Entro y
veo que no hay nadie fuera, solo veo, a través del cristal, que hay una persona
dentro del pequeño y ardiente habitáculo. Perfecto, así me quito la ropa tranquilamente, pienso. Me voy quitando
todo y, por fin, las gafas (para piscina y estas cosas, tengo que renunciar a
las lentillas,jo). Vuelvo a mirar a quien está dentro, porque me surge la pregunta de si me voy a entrar con o sin la parte de abajo y quiero saber cómo estará la que
está dentro. Pero tampoco quería mirar mucho, no se pensara que estaba mirando
algo, oye tú. Finalmente tomé una decisión conservadora y me la quedé.
Con
decisión abro la puerta y me encuentro que el cuerpo que veía (o más bien no
veía en ausencia de mis gafas) era el de un hombre de unos 50 años, calvo y con
perilla. Y de la parte de abajo, qué decir. Este si que no llevaba nada y
estaba sentado con las piernas tan abiertas que no se puede ya decir
espatarrado sino quasi-espagar.
Inmediatamente,
pregunto o casi rebuzno en grititos, “pe-pe-pero esta no es la sauna de las
chicas??” y después, me viene un pensamiento de que… será mixta y le vuelvo a
decir al buen hombre “o es mixta??”
El
hombre muy tranquilo y con una sonrisa me responde, “la de las chicas es la
puerta de enfrente”. Ahora entiendo todo. Yo di por hecho que la sauna de las
chicas era la puerta contigua a los vestuarios de las chicas y viceversa, y
entré directamente sin mirar el cartelito. O incluso, mirándolo dando por hecho
que era el de las mujeres. Porque lo lógico sería que la sauna de mujeres
estuviera al lado de sus vestuarios. Y la de los chicos, junto a los suyos.
Pero no, estaban cruzados. Ante este fenómeno dos preguntas:
-
Quien diseña eso? Y por qué toma esa decisión un tanto ilógica? Por
pura ineptitud? O simplemente no se pensó en ese detalle.
-
Por qué yo lo obvié?y realicé un acto dando por hecho una decisión
externa sin observación ni pensamiento internos. Actos automáticos.
El caso
es que el hombre muy amable, me dijo finalmente, "pero puedes quedarte". No te
fastidia, pensaréis. Pero no, yo lo vi muy natural. Y ahí estaba yo, con mi
mini-toalla anudada a la cintura, pechos al aire y pensar que me tenía que volver a vestir
para ir al otro extremo del pasillo a la sauna de mujeres… Uff. Para eso sí soy más
vaga y coherente conmigo que correcta socialmente o moralista. Le dije, “pues
sí, me quedo, total van a ser 15-20 min que es lo que voy a tardar en vestirme
e ir a la otra”
Y allí me quedé. Intercambiamos las típicas frases del momento…
“si hubiera sido a la inversa y un hombre entra en la de las mujeres, se monta”
“que volviera cuando quisiera, jeje”. Después, entró otro hombre también de 50,
este en bañador, un poco gordito y dije “es que me equivoqué y me voy en 5
minutos, no quiero molestar”. “Nada mujer, lo malo que no has coincidido con
chicos de tu edad que ya que estabas”…
Bueno y
en esa línea agradable-humorística fueron pasando mis minutos en la sauna de
los hombres. Fui a ducharme y me alivió que la ducha tenía puerta, así que como alma
que lleva el diablo me di una ducha rápida y
vestí como pude en el baño. Al salir el primer hombre también ya se
había duchado y se estaba terminando de vestir. Y me dijo que si tenía novio,
le dije que sí. “Estás mejor desnuda que vestida”. Esta frase me la han dicho
casi siempre mis amantes.. Y siempre me he preguntado si es algo que siempre
dicen las amantes como piropo (que no sé, porque yo nunca la he dicho.. .o por
lo menos no lo digo como piropo o cumplido) o es realmente cierto. Yo realmente
lo pienso, que estoy mejor desnuda que vestida. Es una pena que no pueda ir
caminando por la calle así. O, tal vez, es que mi cuerpo era para estar por la
selva o en un lugar utópico para pasear como dios nos trajo al mundo. Cada vez
lo pienso más. Aquí no se está bien con tanta ropa y tantas capas y estados
externos (metro, oficinas, etc.)
Después
pensé si había hecho bien en quedarme o tenía que haber tomado la decisión de
irme a la de chicas. Y que muy pocas mujeres lo habrían hecho. Yo no lo dudé ni
por un momento. Me quedé en la de los hombres porque no me importa lo más
mínimo lo corporal. A ver, me importa mucho el cuerpo, lo intento cuidar,
mimar, escuchar, darle placer… Me refiero a las diferencias de los genitales,
me dan igual. Tampoco me quedé, como pensaría una hetero, para que me hicieran
la ola o me sintiera mirada y/o admirada. Sencillamente me pareció lo más
sencillo y no me importaba nada estar en tetas y al lado de un tio espatarrado
con su super polla. Fue muy agradable estar con ellos, la verdad. Seguramente
hasta más que si hubiera coincidido con varias mujeres que siempre están
hablando de chorradas o criticando.
Y
siempre me han interesado más las almas que los cuerpos. O si quieres, la
preciosa unión entre ambos. Jamás me ha despertado deseo un “cuerpo solo”, tengo
que sentir algo. Y ese algo que tengo que sentir es el alma. Ya sea por la voz,
un gesto… o a veces un no-se-sabe. Realmente
tengo que estar prácticamente enamorada para practicar el sexo. Si no, para
qué? Tengo que sentir algo fuerte para sentir el fuego del sexo y follar bien.
Si no siento el alma me da pereza follar y lo hago mal.
Tengo
que follar con el alma y follar al alma.
Que momentassssoooooo!!! mmm yo me hubiera ido, lo tengo claro. Ahora coincidimos en lo de sentir algo importante para tener sexo. Sexo por sexo, que pereza.
ResponderEliminarUn beso.
Está claro, pero me parece muy frívolo como lo comentas...no sé, te hacía más delicada...al igual que no tengo sexo sin sentir algo por esa chica, tampoco exhibo mi cuerpo, va de la mano...a mi parecer...
ResponderEliminarLa del Hospital.
Ainsss, claro está que una folla pq algo de la otra te atrae, o te pone, ni más ni menos.
EliminarYo no creo que mostrar las tetas sea exhibir el cuerpo, yo hago toples en la playa y no pasa nada , no sólo te ve un tío, ahí te ve todo el mundo.
Besos Marta
PD: A la del Hospital, que pena que nos perdimos la pista...que la vida te cuide y te trate bien. Besos
Cierto ! Eso es otro cantar, o será que soy demasiado reservada, pero creo que eso también me lleva a grandes descubrimientos... ������
EliminarPues nada Noor, por aquí sigo muy de vez en cuando...también deseo que todo esté bien contigo ����
La del Hospital
LadelHos, a veces este formato transmite apreciaciones diversas. A ti te parece frívolo y a mi me parece simpático el tono del post. He dicho tono del post? y desde cuando un post tiene tono jajaja. Vivan los blogs! y sus comentaristas!
EliminarYo hago top-less en piscina, playa, etc.. Creo que no está considerado exhibición. En mi caso, es pura sensación de libertad. Desde el primer día que me quité la parte de arriba, hará 20 años, me cuesta tanto estar con ella.. Lo viví y lo sigo viviendo como una liberación. Así también puede ser física e incluso moral, de clichés sociales, etc.. Lo recomiendo totalmente.
EliminarLa esencia del post radica en que, estar con los pechos al aire, sea con hombres o con mujeres es igual para mí. ¿Debería ser diferente? ¿Con los hombres es exhibir y con las mujeres no? Ahí estaría lo moral, lo convencional.. Y cuando eso cae, aparece sencillamente lo natural. Ser naturales. Me encantó quedarme porque no cedí a lo convencional y a lo moral y simplemente disfruté del momento.
Respecto a la frivolidad versus delicadeza... Hay mucho escrito (y he escrito) en tono de delicadeza. Creo que se me da bien. Y trataba más bien de explotar el contraste que tú justo has destacado. En varios de mis posts creo que hay contrastes entre lo profundo y lo más superficial.
O a lo mejor he sido tanto tiempo delicada, que huyo de serlo..
O a lo mejor simplemente no quiero parecerlo...
Muchas gracias porque me ha sorprendido eso de que me hacías más delicada.. El que alguien me imagine de algún modo es todo un honor..
Blau, por supuesto, que un post tiene tono!! Jaja.. Sí, este formato y mis contrastes transmiten distintas apreciaciones pero la idea era que fuera graciosillo jeje
Noor, así que tú también haces topless :-)
Besos a todas!!
Supongo que es importante que el hombre que estaba dentro reaccionó con mucha tranquilidad, o normalidad. Eso también te invitaría a ser normal tú.
ResponderEliminarMe encanta lo que dices de la relación con tu cuerpo: cuidar, mimar, escuchar, darle placer... Resalto lo de Escuchar y Mimar. Me ha sorprendido gratamente verlo escrito. 'Escuchar a tu cuerpo' cuánto por aprender de él, de nosotros mismos a través de él.
Tienes razón en lo que dices de la naturalidad de él y cómo condicionó toda la situación natural...
EliminarEl cuerpo, pobrecito, a veces le metemos una caña y le hacemos pasar cada burrada... Así que, por lo menos, compensaar...y cuidar y dar mimos..:-)
Pues hacia tiempo que me costaba leer post de mas de dos párrafos... y mira por donde hoy contigo no me esta costando nada...
ResponderEliminarNo se porque leches a veces dejo de pasar por algunos blogs .. sera para poder redescubrirlos.
Yo soy super recatada los dos primeros minutos, o si hay frente a mi alguien que me gusta. Luego ya se me pasa. A quien no le guste...