domingo, 20 de febrero de 2011

Un poquito más, un poquito menos

Mi despertador está adelantando 15 minutos, mi reloj de pulsera 10 y el de mi móvil está en punto.

Como no me levanto ni con una grúa de mi viscolástico de alta gama (cómo me sabe abrazar), pongo el despertador de la mesilla y el del móvil. Así que primero suena el de la mesilla a las 7:15 (hora ficticia) y luego el del móvil a las 7:15 (hora real). Poniendo los dos me siento segura de levantarme a mi hora. Pero aún así siempre llego 10 ó 15 minutos tarde al trabajo.

La primera vez que mi jefe me lo dijo, lo enfocó como una falta de respeto a los demás que están a su hora. Y que si llegaba la última, por lo menos, no me fuera la primera. Yo le respondí que mientras otros llegan puntuales y se ponen a ver su correo personal, las noticias, el tiempo o se van a la cocina y hasta al bar a por un café, yo me pongo a trabajar directamente y "a tope" (creo que utilicé esta expresión). Parece que le convencí porque no me volvió a decir nada; aunque muchos días ni me mira cuando le doy los buenos días. No soporto esta doble moral y menos la pérdida de tiempo. Yo voy a la oficina a trabajar. Y si es justificable que alguien llegue a las 8:45 para luego irse por ahí a tomar café o a hablar. Pues mira, yo llego a y cuarto y voy a lo que voy. Y luego los que se quedan más tarde porque sí, tocándose las narices, para que les vea su jefe. Porque eso sí, si el jefe no está, ellos no están. De verdad, me parece muy triste que alguien esté sin hacer nada, engañando a su jefe, a sí mismo y encima gastando luz. Vete a tu puta casa de una vez. ¿Es que no tienes nada mejor que hacer?

Decía que mi jefe nunca me había vuelto a decir nada desde la primera vez. Salvo hace poco que envío un correo que cuidado con los horarios, etc. Y en una reunión con todos dijo que el que llegue tarde, es muy sencillo, que adelante el despertador 10 minutos. Ay, si él supiera que no es tan sencillo. Es una cuestión mucho más profunda o, por lo menos, complicada. Porque cuando me he levantado, no 10, sino hasta 20 minutos antes, he llegado igual o más tarde. Me ponía a hacer otras cosas porque veía que me daba tiempo, a recoger ropa, buscar algún colgante que hacía años no veía, o me sentaba a esperar. Si es que en el fondo no es por madrugar, bueno sí, pero es más allá de eso. Cuando salgo de viaje pronto, estoy una hora antes en el aeropuerto o en Atocha. Si hay que ir, voy la primera. Pero esto de ir a trabajar todos los días...es como ir por ir. Vamos, porque no hay más remedio. Y creo que me impido a mí misma llegar puntual. No sé si como señal de rebeldía, para manifestar mi descontento por tener que trabajar. O mi inconsciente piensa que si todos los días llego 10 ó 15 minutos tarde lo gano en salud y le robo unos minutos al alma negra, extraterrestre o imbécil que nos jodió la vida a todos inventando esto del trabajo.

4 comentarios:

  1. ... a mi, es lo que me sobra de mi vida, el trabajo... y eso, que hasta hace nada era vocacional...y qué feo, es decir esto, en un pais con tantos parados...
    si, MartaHora -algo no funciona bien en esta sociedad- quiza sea la presencia de seres nuestros jefes ;)

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  2. Bueno, mi jefe es un santo varón, porque si es otro igual me pone de patitas en la calle por los retrasos. Aunque dónde iba a enocntrar este manantial de sabiduría

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  3. ays, como te entiendo... a mí me pasa exactamente lo mismo... pero es que si me levanto 10 o 15 minutos antes, me los pierdo en la parada del bus así que... sigo llegando cinco minutillos o diez tarde. .. pero vamos, yo no me bajo a media mañana MEDIA HORA de reloj a tomarme un café tranquilamente sentada en el bar... y como no me habla casi nadie (ups!) no pierdo tiempo en ir al baño , a la fotocopiadora, en poner a todo el mundo al día de como me va la vida y demás...

    voy a lo que voy...

    nunca me han dicho nada, pero... el otro día la secretaria de mi jefe vino a decirme que había reunion a las 9 y que como siepre llego tarde... (sic), que me cogiera el bus anterior...

    al rato vino a decirme que... la reunión se había anulado...

    mi respuesta: ah vale, ¿entonces supongo que puedo llegar tarde mañnaa también?

    pa chula, yo!!

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  4. jejejej... un santo varón, no del todo ingenuo pues.. ;)

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